La Aceituna:
De todas las variedades de olivo que se cultivan en Montefrío, donde abundan los olivos centenarios, existe un grupo principal, por su mayor difusión, conformado por: PICUAL, PICUDO Y HOJIBLANCO, y otro grupo menos difundido, pero de gran importancia, por su influencia en la mejora de la calidad del aceite, constituido por las variedades: CHORREAO DE MONTEFRIO, BLANQUILLO, MANZANILLO, CARRASCO, GUITOSO, ALOREÑO, BLANQUILLO MENUDO, MANTECOSO Y CORTIJUELO. Las primeras son variedades dominantes en las comarcas limítrofes de las provincias de Granada, Córdoba y Jaén, mientras que las otras son variedades cultivadas desde muy antiguo, siendo algunas autóctonas de Montefrío.
En cuanto a su aceite, la mezcla de variedades hacen que el Aceite de Oliva Virgen Extra de Montefrío sea muy equilibrado de sabor y tenga unas excelentes cualidades organolépticas y que cada vez sea más apreciado y demandado por los consumidores.
Nuestro Aceite:
La excelente combinación de aceitunas procedentes de olivos picuales, manzanillos, hojiblancos, picudos y otras variedades locales dan como resultado la consecución de un equilibrado zumo de inmejorables cualidades organolépticas: De un delicado color dorado con ligeros ribetes verdes, se adorna con un sutil aroma afrutado de aceituna verde y verde hierba y culmina en cata con un delicioso sabor con recuerdos de manzanas verdes y suaves guiños picantes y amargos, que lo hacen ideal para realzar el sabor de cualquier plato, aportando, al mismo tiempo, toda la salud de la dieta mediterránea.
Nuestro mejor aceite de oliva virgen extra está certificado por el Consejo Regulador de la Denominación de Origen "Poniente de Granada", el cual califica únicamente aquellos que superan unas rigurosas exigencias de calidad, mediante un seguimiento desde la aceituna en el campo hasta el envasado del mismo, según un estricto control de trazabilidad del producto, obteniendo así nuestros mejores aceites para su mesa. Estos se envasan bajo la marca ACEITES EL MARMOL” , de Extracción en frío, son fruto de una selección de las mejores aceitunas de olivos de Montefrío, recogidas a primeros de Noviembre de cada año, cuando la aceituna se encuentra aún verde o en envero, consiguiéndose un maravilloso caldo de color verde intenso, aromas de hierba recién cortada y tomatera, con amargor bajo y picor medio.